Silencio, no quiero escuchar nada
Ojos abiertos -ojos sin jade-, la mañana lo despierta.
La misma rutina, las mismas caras, las mismas voces. Gotas que caen suavemente por el cabello, cabello sin olor a avellanas, desparpajado, con gotas que juegan, que bajan lentamente en su pequeño amorío gravitatorio.
Tu, lejana, mas lejana que ayer o que antier, o que hace dos días. No suena tu voz en mi cabeza, solo tus palabras. No importa no escuchar nada, aún así te adoro. No importa que no digas nada. En serio, ¿a quien carajos le importa?
Autobús, café, chica del pan. Norah Jones, en el ipod. Cristales que no reflejan tu rostro y ¡cuanto quisiera que lo hicieran! Miradas, pendejadas.
¡Al carajo el mundo! ¿Porqué tuviste que hablar? Mejor Norah, de tí no quería escuchar nada.
6 comentarios:
este texto es un misterio, cuando menos para mi
Y es mejor que sea así mi estimado :)
misterioso o no esta muy lindo
asi es, maho siempre lindo. se nota tu gusto por el cine independiente, lo digo porke en alguna pelicula me parecio ver una letra parecida mas no igual.
Solo inconcientemente podría haber dicho algo que vi en el cine. Realmente no tiene nada que ver con eso :)
¿Qué onda, el próximo fin a San Blas?
Uy que lindo escribes, me compondrias uno a mi papi?? te estaria muy agradecido ;)
Besos, Arturo.
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