El escritor se dio cuenta una mañana de mayo de que estaba embarazado.

Aquí más que un concurso podemos encontrar ejercicios muy buenos para nuestro cerebro.

El ejercicio consiste en que a partir de una frase que propone un escritor cada semana desarrollemos un microcuento corto de máximo 600 caracteres incluidos espacios.

La frase de esta semana fue:

El escritor se dio cuenta una mañana de mayo de que estaba embarazado.

Y aquí mi microcuento (de 600 caracteres exactos):

El escritor se dio cuenta una mañana de mayo de que estaba embarazado. La gestación de un invierno había dado a luz esa misma noche mientras la lluvia serena bajaba entre los adornos neozelandeses provocando un intenso aroma a verano. ¿Qué hacía la lluvia en estaciones no permitidas? M lo observaba serena. Encendió un cigarro mientras se acercaba. Sorbió el último trago de vodka con una calma aciaga y se inclinó un poco. Última bocanada, embriagador jugueteo engarzado, placer bestial de nicotina. La sangre alcanzaba ya su zapato izquierdo, precipitando su partida. Los ojos de M lo miraban fijamente sin poder delatar con su brillo funebre el crimen de la calle 28.

Como siempre -aunque no lo diga- espero críticas.