"Paraísos artificiales"
Así es, estos días he viajado un poco mas de lo normal. El Sábado estaba aún en Guadalajara, Jalisco despues de pasar una semana con mi niña ya que nos tendremos que separar por un tiempo, y ese mismo día regresamos a Tepic, Nayarit.
El Domingo nos lanzamos a Puerto Vallarta, Jalisco; regresé el Lunes pasado y apenas ayer en la noche me volví a lanzar para regresar nuevamente hoy en la mañana. :S
Así que medio desorientado (sobre todo por los climas) aquí estoy, preparandome para irme nuevamente el sábado 7 a Guadalajara, pero esta vez para radicar definitivamente por al menos 5 mesesotes. Estaré laborando en Innox, y espero todo salga bien, estoy un poco nervioso.
Y entre nervios, gustos, disgustos, un frío tolerable y muchas tazas de café dormitaba en un cuarto de mi cuñada Patricia la semana pasada. Es de esas veces donde uno acostado piensa en tremendas estupideces y grandes teorías. No recuerdo donde empezó y dificilmente atisbaría que fué lo que la inició.
- "¿Qué tal si por un momento supusieramos que Dios existe?" - Me dije.
Y vamos, terminé suponiendo hasta que pasaría si el paraiso existiera. Mi estimado Juako ya me había dado la idea hace mucho: "Que importa, igual no soportaría una ETERNIDAD en un lugar así, y si pudiera soportarla no sería yo mismo, entonces ¿para que?". Intenté darle otro enfoque: "Si el paraiso es cristiano entonces necesito cumplir con los mandamientos del Dios judeo-cristiano".
Primero de ellos: "Amaras a Dios sobre todas las cosas". Veamos, no puedo hacer esto, pues suponiendo que exista, amo mas la idea de ir al paraiso que de amar a Dios. Es decir, quiero ir al paraiso y si para eso necesito amar a Dios, entonces debo amar a Dios independientemente si voy al paraiso o no, porque eso sería un interes, y el amor a Dios debe ser mayor que un interes!! Vaya paradoja... sobre todo para mi que no creo en el amor como tal...
Un cúmulo de imágenes y recuerdos sobrevinieron a este pensamiento, desde los evangelizadores de puerta en puerta que me intentaron chantajear alguna vez que estaba enfermo, hasta mi abuela viva que cree en Dios para que le ayude a encontrar un taxi. ¡¡Necesito conocer a alguien que ame a Dios aunque no exista o se porte culero!!
Ok, ok... entonces supongamos que existe y no voy a ir al paraiso porque no cumpló con ese mandamiento. ¿Entonces de que sirve? Pues lo ignoro, me sería completamente indiferente. Veamos, si existe, o lo amo o me es indiferente. ¿Chido, no?
¿Y para las demas personas?
Supongamos entonces que existe, y que hay personas que lo aman y por consiguiente van a ir al paraiso. ¿Cuantas de esas personas existen?. Mencionaba parrafos atras que no conozco a nadie así, estupidamente supongamos que esas son las únicas personas que no van a ir al paraiso. ¿Sus familiares (MIS FAMILIARES!!) estarán agusto en el paraiso sin sus seres queridos? ¿Y los familiares de los amigos? ¿Y los amigos de los conocidos? ¡Vaya entonces no es paraiso!
¿Y que tal si alguien estuviera feliz en el paraiso sin algun ser querido? ¿Vaya cosa no, o no es él mismo o es egocéntrico? ... esperen, los egocéntricos no van al paraíso.
¡Aja! Para ir al paraíso uno necesita no ser uno mismo. ¿Aceptas la oferta?
¡Aja! Que importancia tiene entonces... luego me dormí.
3 comentarios:
A tu reflexión sobre el paraíso le faltan algunos elementos que tal vez sean importantes.
Juako no se ha dado cuenta que, si asumimos que existe una vida posterior a la muerte, desaparece la percepción temporal, por lo cual, si pasas una eternidad en el paraíso, no hay modo de que percibieras si fue un instante o siglos transcurridos.
Por otra parte, es un poco difícil que englobes toda las creencias judeo-cristianas con respecto al paraíso, ya que es algo muy diverso: para muchos creyentes protestantes, el cielo y el infierno son lugares físicos, con número limitado de participantes. Para los católicos, no existen como tal esos lugares, sino es una forma de entender tu cercanía o lejanía con Dios. En el resto del comentario, seguiré la línea católica de pensamiento, porque es la que conozco mejor.
Entonces, de acuerdo a la creencia católica, si el paraíso no es un lugar, sino tu cercanía o lejanía con la divinidad, no puedes disociar el amor a Dios con el deseo de ir al paraíso; es querer al ser amado y querer estar cerca del ser amado.
Aunque dices que no crees en el amor como tal. Tomaré la siguiente definición, del Diccionario de la Lengua Española: "Sentimiento intenso del ser humano que, partiendo de su propia insuficiencia, necesita y busca el encuentro y unión con otro ser". Siguiendo esta definición, tú amas, ya que tienes novia y familiares que aprecias. En algún momento de tu existencia reconociste que no te bastas a tí solo, y necesitas de alguien más a tu lado.
Siguiendo con el pensamiento católico, aspiras a estar cerca de Dios porque es el bien máximo, que completa tu ser. ¡Pero todos los seres humanos aspiramos al bien! Naturalmente no buscas dañarte a tí mismo (amor a tí mismo) ni a los demás (amor al prójimo), y aquellos que lo hacen se apartan del resto de la gente. De esta manera, basta con hacer el bien para estar cerca de Dios; no necesitas morir ni ser católico para experimentar la divinidad.
Pero el hacer el bien es una decisión personal e individual. Los seres humanos podemos voluntariamente ir en contra de nuestra naturaleza y dejar de hacer el bien. Puedes aconsejar a alguien que haga el bien, pero la decisión es suya. Entonces, ¿es posible que todos los familiares que amas se decidan a hacer el bien? Si es así, todos estarán cerca de la divinidad. Si no es así, es lamentable, pero si los amas, aceptas su decisión. La definición de amor no implica reciprocidad: tú amas, pero no significa que a cambio, te amen.
Así que para ir al paraíso, que podemos definir como una cercanía a la divinidad, debes ser tú mismo, ya que la búsqueda de ese encuentro es una decisión personal.
CFuga
http://cfuga.net/
Gracias por tu comentario CFuga.
Nadie ha demostrado que despues de la muerte desaparece la percepción temporal, sin embargo es tan justo creer que esta desaparece como el que yo afirme que sigue existiendo. Tal vez despues te puedas morir de nuevo ;)
"Por otra parte, es un poco difícil que englobes toda las creencias judeo-cristianas con respecto al paraíso".
Tienes mucha razón, me di cuenta de ello cuando redactaba el post, sin embargo sucede (como bien lo menciona Hernán Casciari) como aquellos sueños en los que uno cree tener una gran idea para una historia, pero cuando uno lo plasma en realidad no es tan buena como creeiamos, mi reflexión sucede poco antes de dormir, en un estado cercano al sueño.
"Entonces, de acuerdo a la creencia católica, si el paraíso no es un lugar, sino tu cercanía o lejanía con la divinidad, no puedes disociar el amor a Dios con el deseo de ir al paraíso; es querer al ser amado y querer estar cerca del ser amado."
Gracias por la aclaración, la verdad desconocía que el paraíso en el catolicismo significaba la cercanía con la divinidad.
En general, te agradezco tu tiempo y tus comentarios.
Pues, dios es un wey que no le interesamos en lo absoluto, y nadie va al paraíso o al infierno, vamos a un limbo, y pues ya.
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